martes, 20 de marzo de 2012


Un buen título para las obras completas de casi todos los escritores: LAPSUS CALAMI.

5 comentarios:

Ballerina dijo...

El título, fantástico, pero yo ya dudo de la existencia de "obras completas", como concepto. Al menos, en algunos casos.Que luego se muere uno y ahí tienes a los familiares, herederos (no confundir con los primeros), esposas del país del Sol Naciente y demás publicando hasta los boletos de las quinielas del finado. Eso sí, todo convenientemente prologado, revisado y cobrado. Todo esto haciendo, por supuesto, caso omiso a los deseos del difunto, al que ya solo le queda ver desde el cielo (en el mejor de los casos) cómo sus herederos publican un manuscrito que él tenía guardado bajo siete llaves porque era un auténtico bodrio, no quería que nadie lo viera y pensaba deshacerse de él justo en el momento en el que le dio el arrechucho que se lo llevó al Más Allá. "Obras completas..." No sé yo.

Anónimo dijo...

¡Pues a mí el que realmente me preocupa es mi lapsus memoriae!
saludos B

Marcos Matacana dijo...

O también: OPUS INTERRUPTUS.

J.A. González dijo...

"Calamitas calamitatis". No hay nada que me asuste más que estar completo, mortadela.

Crishmona dijo...

Crismona, Crismona.