Parece un juego divertido, y me pregunto qué hubiera comprado Pérez-Reverte de haber tenido la tarjeta. Ya puestos, aprovecho para opinar que lleva más razón que Rico, en su reciente disputa, aunque a su segundo artículo le sobra la última frase (por lo que tiene de amenaza).
Si partimos de que el ego es la medida del alma, aquí nos encontramos con la paradoja de que estos hombres con tanto ego son unos desalmados.
ResponderEliminarParece un juego divertido, y me pregunto qué hubiera comprado Pérez-Reverte de haber tenido la tarjeta. Ya puestos, aprovecho para opinar que lleva más razón que Rico, en su reciente disputa, aunque a su segundo artículo le sobra la última frase (por lo que tiene de amenaza).
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